Primero tengo que recordarles que este sueño ocurrió un par de días después de la primera parte de las revelaciones (para que tenga sentido todo, leer la entrada 18 del diario). Tuve un sueño antes de lo que fue la verdadera "revelación" y aunque, no fue tan importante, si fue aportó bastantes datos.
Fue un sueño bastante largo, pero iré directamente a la parte relevante. Estaba molesto, bastante molesto, cosa que nunca o muy rara vez estoy dentro de los sueños. Me encontraba recorriendo algunos lugares de una calle en una ciudad. Todo el ambiente se sentía hóstil, aunque no sabía exactamente el por qué. Mientras intentaba aplicar un par de cosas en las que había pensado cuando estaba despierto un grupo de gente se acercó hacia mi, guardando su distancia, yo sabía que no eran personajes de mi sueño, sino algo más como en otras ocasiones, pero no les presté mucha atención. Comencé a tratrar de manipular el sueño de una manera que no había intentado antes.
Empecé a sentir las nubes y a dirigir rayos y truenos hacia estas personas que eran destruidas volviéndose polvo en cuanto entraban en contacto con los rayos. No era solo aparecer dichos rayos en las nubes porque si eso se pudiera hacer, simplemente los podía generar para que salieran de mis manos; cosa que no era posible. Lo que hice para poder "generarlos", fue sentir una especie de fuente muy a lo lejos en el cielo justo en el límite de este, cosa que tampoco nunca había sentido como en este sueño. Después de sentir dicha fuente lo que hice fue como dirigir con una línea de energía el camino del rayo. Al dirigir los rayos no fue como tener puntería y "dispararlo", también sentía la energía de los expectantes y era como unir puntos, desde la fuente de energía hasta el expectador, y con esto, el rayo caía en consecuencia a su destino.
Usando estos rayos eliminé algunas de estas personas que se encontraban acechándome, quizás docenas, pero en cierto punto; como suele pasar, se adaptaron y se volvieron inmunes. Lo siguiente que hice fue un chispazo de una idea que surgió de mi mente, se me ocurrió en un segundo. Tomé una piedra y la puse en mi punto ciego, después la transformé en una katana (espada japonesa) y ataqué directamente a quienes resisitieron los rayos.
Como nota, desde hacia un buen rato las armas punzo-cortantes ya no tenían efecto cuando me defendía con ellas, por lo mismo de que dichos entes se acostumbraron y se adaptaron, pero esta vez mi arma estaba siendo efectiva, fue cuando hice una observación importante: estos espectadores/entes/personajes tienen que pensar en su defensa para efectuarla, si no tienen tiempo de pensar los puedes afectar cambiando tu táctica.
No recuerdo si fue antes o después de mi ataque con la katana, que también intenté hacer caer multiples rayos sobre todo lo que pudiera para fracturar el sueño por destrucción. El efecto fue curioso; otra de esas cosas que no había visto antes. Parece que el sueño en si no soportó mi ataque con múltiples rayos, sentí algo así como que el espacio entre el cielo y la tierra se acortaba como si el sueño se afectara. También observé algo así como cuando en las películas o series se pasa a través de un holograma, como una distorción, lo mismo le pasó al sueño.
Después de toda la destrucción el día cayó y yo seguía con mi exploración, cuando noté un personaje que me observaba, pero al percatarse de que lo noté huyó. Este individuo no tenía un aura malvada ni tampoco era parte del sueño, sabía que era diferente, pero no como los personajes que habpia destruido, no sabía si escapaba de mi por miedo o por diversión. Cuando lo alcancé le demandé que me dijera el secreto para mantener el sueño sin despertar, sin que se cortara (no estoy seguro de por qué pensé que el lo sabía), recuerdo que sonrió y lo que pasó fue como si dejara de soñar, todo se detuvo y fue como si ese personaje me mostrara imágenes, esto ya no era parte del sueño, por que no tenía ningún movimiento, era como solo poder ver una foto panorámica y ya, sin poder hacer nada más. Todo lo que podía observar era esta imagen en gigante que tenía algo así como 3 pergaminos, cada uno contenía notas musicales. El primero 3 notas y los siguientes dos, 4 notas. Mientras pasaban estas secuencias y escuchaba la melodía, el sujeto decía que esta secuencia en cierta frecuencia me dejaría soñando mientras estuviera activada.
La verdadera revelación y la conexión con la parte pasada, fue que al final de esta maratónica noche de sueños, cuando estuve a punto de despertar apareció esta imagen en mi mente de manera similar a la de las notas musicales. En la imagen aparecía una mujer japonesa de entre 33 y 36 años, sonriendo, en una especie como de salón de clases o de juntas, al ver esta "foto" sentí una extraña familiaridad con quien aparecía en ella.
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